Centro de psicologia lc
Terapia niños y adolescentes
La infancia y la adolescencia son dos etapas clave en el desarrollo de la persona, por lo que determinadas vivencias como un divorcio, un problema de habilidades sociales o un episodio de acoso escolar, pueden causar que dicho desarrollo se vea entorpecido, provocando malestar emocional en el menor y en su entorno.
Es muy importante que las personas más cercanas, principalmente familiares y personal docente, estén atentos a los cambios que suceden en el niño, tanto a nivel emocional (estar más irascible, más triste o querer aislarse del entorno), como de conducta (no querer ir al colegio, cambios en su comportamiento, en su patrón de sueño o de alimentación), ya que en muchas ocasiones el menor no alcanza a comprender que le sucede y, por lo tanto, no es capaz de pedir ayuda por sí mismo.
Los motivos más frecuentes por los que un menor acude a terapia son problemas de acoso escolar, síntomas de ansiedad, baja autoestima, bajo estado de ánimo, celos entre hermanos, fobias, problemas para relacionarse, inseguridad, obsesiones, problemas de conducta…
La terapia infanto-juvenil se plantea como un trabajo conjunto entre el psicólogo, el menor y la familia. Si tu hijo se encuentra en alguna de estas situaciones, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, ya que cualquier hecho que le preocupe puede ser tratado en terapia.